ANTE EL TRONO
DE LA VIRGEN MISIONERA
ANTE EL TRONO
DE LA VIRGEN MISIONERA,
HOY NOS JUNTAMOS ACLAMANDO SU PODER.
ELLA ES PERPETUO SOCORRO
DE LOS POBRES,
GRACIA DE DIOS,
FUENTE DE TODO BIEN.
Es tu cuadro milagroso entre las flores,
mina de oro de riquísimo filón,
do descubren en su vida los pobres
el camino que los lleva al Señor.
Celebrando victoriosos nueva vida,
hoy queremos compartir juntos la paz,
y la Palabra preciosa que se anida
dentro de quien, amar, es capaz.
Al llegar al altar con los hermanos,
y la Cena del Señor celebrar,
con gozo extendemos nuestras manos,
acogiendo a quien viene a liberar.
PEDIMOS A MARÍA
QUE CUSTODIE NUESTRAS FAMILIAS
Madre del Perpetuo Socorro,
bendice con tu tierno amor de madre
nuestras familias.
Que el sacramento del matrimonio
mantenga cada vez más unidos
a esposo y esposa a fin de que siempre
se mantengan mutuamente fieles
y se amen también mutuamente
como Cristo nos ama.
Ayuda a todas las madres
y a todos los padres a que amen
a los hijos que Dios les ha confiado.
Que siempre sean modelos
de una vida realmente cristiana.
Ayuda a todos los niños
a que amen y respeten a sus padres.
Haz que todos valoren
el matrimonio cristiano
y la vida de familia.
Danos sentido de responsabilidad
a fin de que nos empeñemos
en que nuestros hogares sean
lugares de amor y de paz.
María, nuestro modelo,
ayuda a todas las familias a crecer
constantemente en el auténtico amor
a Dios y al prójimo
a fin de que la justicia y la paz
florezcan por doquier
allí donde haya una familia humana. Amén.
ORACIÓN POR LAS VOCACIONES
REDENTORISTAS
Señor Jesús,
Maestro, Pontífice y Pastor,
que nos conduces a tu Reino.
Tú dijiste:
“La mies es mucha y los obreros pocos,
rueguen al Dueño de la mies
que mande obreros a su mies”.
Tú sabes cuánto necesita
de buenos pastores tu rebaño.
Enciende, pues,
en el corazón de muchos jóvenes,
el afán de entregar generosamente
sus vidas a tan noble ideal.
Particularmente,
imploramos abundantes llamados,
para tu amada Congregación
de Misioneros Redentoristas
que, impregnados del espíritu
de san Alfonso María de Liguori,
lleven tu Evangelio especialmente
a las almas más desamparadas.
Te lo pedimos por nuestra Madre,
la Virgen Misionera del Perpetuo Socorro. Así sea.
ORACIÓN DEL PAPA JUAN PABLO II
A LA VIRGEN DEL PERPETUO SOCORRO
Signo grandioso de nuestra esperanza, te invocamos.
Oh Virgen del Perpetuo Socorro,
Santa Madre del Redentor,
socorre a tu pueblo, que anhela resurgir.
Da a todos
el gozo de caminar hacia el futuro
en consciente y activa solidaridad
con los más pobres,
anunciando
de un modo nuevo y valiente
el evangelio de tu Hijo,
fundamento y cima
de toda humana convivencia,
que aspira una paz justa y duradera.
Como el Niño Jesús,
que admiramos en este venerado icono,
también nosotros queremos
estrechar tu mano.
No te falta a ti ni poder ni bondad
para socorrernos
en cualquier necesidad y situación.
¡La hora actual es tu hora!
Ven, pues, en nuestra ayuda
y sé para todos el refugio y la esperanza. Amén.
HIMNO OFICIAL A LA VIRGEN
DEL PERPETUO SOCORRO
Dios te salve, Dulcísima Virgen,
Perpetuo Socorro del triste mortal.
Tu manto bordado en oros
es emblema de riqueza celestial.
Tus manos son tesoros
de ternura maternal.
POR ESO TUS HIJOS,
CON VOCES VIBRANTES,
TE CANTAN, OH MADRE,
UN HIMNO TRIUNFAL. (2)
Esa estrella que en tu frente
derrama sus resplandores sin cesar,
con su luz resplandeciente
los más pobres pecadores va a buscar.
Cuando en la culpa me veas,
Madre de Dios,
que tu estrella no me deje de alumbrar.
Dios te salve, Dulcísima Virgen, …
seas invocada,
seas eternamente bendita.
¡Virgen del Perpetuo Socorro!,
mi esperanza, mi amor,
mi Madre, mi refugio
y mi vida. Amén.